Estados Unidos: la "invasión" de tarántulas que es también un atractivo turístico

En todo el mundo hay cada vez más turistas de naturaleza, y amantes de admirar fauna en libertad. Miles de personas se desplazan constantemente por el planeta en busca de admirar la vida salvaje, desde ballenas, orcas o pingüinos hasta canguros, osos, elefantes o leones... y también tarántulas.
Las zonas áridas del oeste y sudoeste de Estados Unidos, especialmente en estados como Oklahoma, Colorado, California, Kansas, Nuevo México y Texas, comenzarán a experimentar en unas dos o tres semanas un fenómeno único, que así como resulta fascinante para muchos, puede ser espeluznante o aterrador para muchos otros.
“Tarantula crossing” se ha bautizado a este particular espectáculo migratorio que atrae a miles de turistas, y que no es más que la temporada de apareamiento de estos arácnidos, cuando decenas de miles de machos salen de sus madrigueras en busca de hembras, un fenómeno que ocurre cada año en el otoño del Hemisferio Norte, cuando es muy común encontrarse con estos artrópodos en calles y casas, o cruzando carreteras en sitios remotos.
Cruzando la ruta. En el otoño boreal, miles de tarántulas macho salen a buscar hembras para aparearse. Foto Shutterstock
“Si tienes suerte, podrás ver hordas de estos animales cruzando las carreteras en algunas épocas del año”, dijo Dan McCamish, científico ambiental senior de los Parques Estatales de California, en declaraciones al diario norteamericano USA Today.
Y aunque estas arañas puedan poner los pelos de punta a muchas personas, su pedido es "dejarlas en paz". “Es un animal salvaje, no quiere que lo recojas, lo ames o lo abraces (…) En general, la especie es muy dócil, pero si la manipulas, podría morderte”, explicó.
Y agregó que “son animales gentiles y valiosos desde el punto de vista ecológico (…) Están interesados fundamentalmente en evitar las confrontaciones, sobre todo con algo que saben que podría aplastarlos”.
Una persona sostiene una tarántula negra en el Gran Cañon, en Nevada. Foto Shutterstock
Por su parte, el Programa de Extensión de la Universidad Estatal de Oklahoma destaca que estos arácnidos no son peligrosos para los humanos, y es más probable que huyan del encuentro antes que morder a una persona; ello puede representar un último recurso cuando se sienten amenazados.
También puede defenderse con sus pelos urticantes del extremo del abdomen. Cuando se estresan, frotan sus dos patas traseras para liberarlos, y en contacto con la piel, causan una picazón molesta, pero no es grave.
Las Vegas. Las tarántulas no son agresivas y no muerden si no se las molesta. Foto Shutterstock
Las tarántulas generalmente habitan en climas secos y áridos o semiáridos, que en Estados Unidos predominan en estados del oeste y suroeste como Arizona, California, Texas, Nuevo México, Nevada, Utah, Colorado, Oregon y Washington.
Aunque en todo el país hay 29 especies de tarántulas descritas, y también es posible encontrarlas en otros sitios de climas diferentes, como el sur de Florida, donde habita la rabadilla roja mexicana, y en Misuri, hogar de la tarántula marrón de Texas, que es una de las más comunes junto con la tarántula rubia del desierto. En Arizona incluso hay una que se destaca por su abdomen color rojo fuego.
Durante la mayor parte del año las tarántulas se mantienen en sus madrigueras subterráneas. En invierno suelen entrar en una especie de letargo dentro de sus madrigueras, por lo que no se las ve. En la primavera comienzan nuevamente a salir a cazar, pero sin alejarse mucho de sus refugios, y en verano salen por las noches, por lo que no es común verlas durante el día.
Un cartel advierte sobre la presencia de estas arañas. Foto archivo
Pero con el fin del verano y la llegada del otoño, sobre todo entre fines de agosto y noviembre, comienzan a salir más y suelen estar fuera toda la noche y hasta el amanecer, que es cuando se las puede ver.
Los machos salen a merodear en busca de hembras, que para facilitar el encuentro, suelen quedarse quietas en su madriguera o cerca de ella, liberando unas sustancias líquidas llamadas feromonas para atraer al macho.
Así que, quien busque ser testigo de este particular fenómeno de tarántulas "invadiendo" casas, calles y rutas, que se prepare para recorrer el oeste y sudoeste de Estados Unidos entre fines de agosto y fines de octubre.
Tarántula del desierto. Foto Shutterstock
McCamish explicó que las tarántulas juegan un importante papel en la naturaleza, ya que contribuyen al equilibrio ecológico al controlar la población de insectos: son depredadores de emboscada lentos y pacientes que regulan la biodiversidad.
Además, sus madrigueras mejoran la aireación del suelo y la filtración del agua, especialmente en el desierto durante las lluvias. Y cuando las abandonan, esas mismas madrigueras se convierten en refugios para otros animales, como lagartos, insectos y otros pequeños mamíferos.
Una tarántula en el Parque Nacional Zion, en Utah. Foto Shutterstock
"Además, son un excelente indicador ecológico que ayuda a los biólogos a evaluar rápidamente el estado de salud de un ecosistema", destacó.
Clarin